viernes, 21 de octubre de 2011

QUE ETA NO CONDICIONE NUESTRO FUTURO


El anuncio de la banda de criminales Euskadi ta Askatasuna  E.T.A. de abandonar su actividad delictiva es una buena noticia, pero no es la noticia. Medio siglo después del comienzo de su siniestra carrera criminal dicen que la dejan. Desde la firmeza de nuestras convicciones y con el recuerdo de la sangre derramada de centenares de personas de toda edad y condición, los miles de heridos, las personas que tuvieron que abandonar sus hogares, su medio de vida, la sensación es agridulce. Quizá algunos, algún día, podamos perdonar, jamás olvidar. La paz, qué palabra tan bonita y manoseada, debe ser fruto de la justicia, la confianza y el respeto. No se otorga de manera graciable por un grupo criminal que se ve sin fuerzas para conseguir sus objetivos primarios. Aquí no hay ningún conflicto. Sólo criminales que creyeron que podían imponer sus alucinantes propuestas por medio de la coacción, el chantaje, el secuestro y el crimen y sus víctimas. Esperamos su completa disolución, entrega de las armas, reparación del daño causado y colaboración con la Justicia para el total esclarecimiento de todos sus actos delictivos. Siguen, con su lenguaje de siempre, viviendo en su mundo imaginario. ETA sigue viva y no podemos aceptar que sea sujeto político en esta etapa de cambio y esperanza que se abre con las elecciones legislativas del 20 de noviembre. En buena lid política, en sede parlamentaria, podremos escuchar y debatir sus propuestas, si tienen quien las defienda, pero que no esperen premio por dejar una actividad terrorista que jamás debieron comenzar. Es necesario que en todos los rincones de España, también en Euskadi, podamos expresar libremente nuestras ideas sin ser señalados por el dedo acusador. Es la hora de construir una sociedad donde todos podamos expresar nuestras ideas y nuestro proyecto de vida sin ser discriminados por nuestra raza, lengua o condición. Todas las fuerzas políticas, económicas y sociales están llamadas a colaborar en este gran objetivo de reconciliación nacional. Es nuestro gran objetivo. Caminemos juntos para lograrlo.

1 comentario:

Viky dijo...

Esperemos que ésto no sea una treta más.
¿¿¿ Hasta cuando esperaremos la entrega de armas y que pidan perdón y reconozcan a las victimas????